Brigada Internacionalista: casi 15 años de solidaridad en Venezuela
Por Solange Engelmann
De la página del MST
Desde hace unos 14 años, basándose en la solidaridad y el intercambio de saberes y conocimientos entre los movimientos populares, la brigada internacionalista Apolônio de Carvalho del MST (BIAC) realiza actualmente actividades de formación y capacitación en agroecología y producción de semillas en Venezuela, además de mantener intercambios de estudiantes de medicina en el país.
Las acciones de integración popular se llevan a cabo en colaboración con los movimientos campesinos, el Ministerio de Agricultura y el Ministerio de las Comunas de Venezuela. La iniciativa comenzó en 2006, después de que el ex presidente Hugo Chávez visitara un asentamiento del MST en Tapes, Rio Grande do Sul, durante el Foro Social Mundial celebrado en Porto Alegre el año anterior. Judite Santos, del Colectivo de Relaciones Internacionales (CRI) del MST, relata que la brigada Apolônio de Carvalho opera en diferentes frentes y sectores, pero su enfoque central es la realización de experiencias agroecológicas.
Como resultado, se apunta a fortalecer la solidaridad mutua e internacional entre el MST y el pueblo venezolano. “Hoy tenemos un grupo de militantes trabajando en la región de Lara, en el interior de Venezuela. Allí tenemos un trabajo enfocado a la agroecología, con acompañamiento técnico en la producción de hortalizas agroecológicas, en una de las comunas más productivas, la Comuna de El Maizal. El MST también contribuye a la construcción de una escuela de agroecología para formar jóvenes campesinos de la región”, explicó.
Según Judite, en Mérida, región andina de Venezuela, también se realizan actividades con iniciativas de formación de grupos de productores de semillas agroecológicas, en intercambio con la Red de Semillas Agroecológicas BioNatur, vinculada a las familias asentadas del MST en el Brasil. También mantiene en el país un grupo de unos cien estudiantes de medicina del MST y de la Vía Campesina.
Para el coordinador del BIAC, Édson Bagnara, la cooperación de la brigada en Venezuela establece una relación política y de solidaridad que genera importantes contribuciones para el pueblo venezolano y el Movimiento. “Fruto de la solidaridad de la revolución bolivariana con el MST, nuestra gran contribución no es sólo para el país, sino para el Movimiento a través del intercambio, en llevar y traer el conocimiento – hay varios beneficios entre los dos pueblos”, apuntó Bagnara.
La brigada también establece articulaciones políticas con varios sectores de la sociedad venezolana y el gobierno, en la capital del país, Caracas. La cooperación con el gobierno se desarrolla con el Ministerio de Comunas, en programas de formación e intercambio, en comunas urbanas y empresas sociales. Bagnara señala que el principal desafío de Venezuela, que afecta el desempeño de la brigada, radica en la estructura social adoptada por el país, que durante más de cien años fue dependiente del petróleo e importó gran parte de los productos agrícolas.
“Entonces, el desafío es hacer que el país reconstruya una agricultura sustentable y campesina, para volver a ser soberano en la producción de alimentos”, dice.
El otro límite de las acciones de la brigada es el avance de un proceso revolucionario, que se contrapone al imperio estadounidense. “El desafío permanente es esta participación con el pueblo venezolano en la construcción del proceso revolucionario. Y allí, nos enfrentamos a las agresiones del imperio norteamericano, principalmente relacionadas con el bloqueo económico – que afecta directamente a la población venezolana”, concluyó Judite.
*Editado por Luciana G. Console
**Traducción: María Julia Giménez